CADA VEZ MAS CERCA DE LA VERDAD SOBRE LOS ASESINATOS DE VALMORE LOCARNO Y VICTOR ORCASITA

El desmovilizado aseguró que ese grupo al margen de la ley, supuestamente, fue financiado por la explotadora de carbón, a cambio de protección a su vía férrea y asesinato de varios sindicalistas que se habrían convertido en ‘una piedra en el zapato’.
La versión ‘salpicó’ al hoy gerente de Relaciones con la Comunidad de Drummond, Alfredo Araújo, a quien ‘El Samario’ señala de haber, supuestamente, participado en varias reuniones con el grupo alzado en armas.

En el relato, el exjefe paramilitar aseguró que presenció un encuentro del cual hicieron parte Óscar José Ospino Pacheco, alias ‘Tolemaida’; Jaime Blanco Maya; y Jairo De Jesús Charris Castro, alias ‘Migue’; supuestamente adelantado en un casino cercano a la Drummond, en el cual Blanco Maya ofrecía alimentación a los empleados de la multinacional.

El propósito de ese encuentro, según ‘El Samario’, era planear el homicidio de sindicalistas que estarían promoviendo un paro al interior de la explotadora de carbón (lo cual dejaría millonarias pérdidas).

Pero ese encuentro no habría sido suficiente para concluir los homicidios de los que más adelante serían víctimas Valmore Locarno Rodríguez y Víctor Hugo Orcasita Amaya, sino que después se registró otro contacto “al frente de la entrada de Drummon”, en donde habrían concurrido ‘Tolemaida’, alias ‘Kener’ y Alfredo Araújo. Ahí se habrían ultimado los detalles de los asesinatos.

A través de una fotografía, Alcides Manuel Mattos Tabares identificó ayer a Alfredo Araújo, ratificando su versión que él estuvo en la reunión y “esperaba orden de altos directivos de Drummond para iniciar la desaparición de todos los sindicalistas”.

Encuentros en Valledupar
Para recibir el testimonio de Alcides Manuel Mattos Tabares, alias ‘El Samario’, la Corte del Distrito Norte de Alabama requirió de la asistencia del Juzgado Tercero Penal del Circuito de Valledupar, orientado por el juez Alfonso Tatis.

‘El Samario’ indicó que dentro de las Auc se enteró que existieron múltiples reuniones entre los paramilitares y Alfredo Araújo, en las que además habría participado Jaime Blanco Maya. Uno de los puntos de reunión habría sido el Edificio El Portal del Valle, en donde Drummond tiene instaladas oficinas en Valledupar.

Otra de las revelaciones hechas por ‘El Samario’ apunta a que un patrullero de las Auc se encontraba laborando como subcontratista de la Drummond y éste se encargaba de revelar al grupo alzado en arma “los movimientos que ocurrían al interior de la multinacional por personas que al parecer tenían vínculos con la subversión”.

Arístides Peinado era el encargado de informar los hechos ocurridos al interior de la explotadora de carbón, al frente ‘Juan Andrés Álvarez’.

Así mismo, Mattos Tabares señaló a Jairo De Jesús Charris Castro de ser el enlace entre los paramilitares y la Drummond, ya que supuestamente era allegado a los directivos de esa empresa “y no se podían hacer reuniones constantes”.

Vanguardia Valledupar intentó contactar a Alfredo Araújo para conocer su posición frente a las afirmaciones hechas por Alcides Manuel Mattos Tabares, alias ‘El Samario’, pero éste se encuentra fuera de Valledupar, según confirmó su asistente personal, quien conoció de la búsqueda por parte de este medio periodístico.

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Atendiendo el requerimiento de asistencia judicial emitida por el Tribunal del Distrito de los Estados Unidos, Distrito Norte de Alabama, Alfonso Tatis, juez tercero penal de descongestión adjunto de Valledupar, presidió, como garante, la declaración pública de Alcides Manuel Mattos Tabares, alias ‘El Samario’, en el caso que lleva ese despacho norteamericano en contra de la multinacional Drummond por el asesinato de varios sindicalistas de la empresa carbonífera; la desaparición de miembros del CTI y los presuntos nexos de la empresa carbonífera con las autodefensas, entre otros hechos más que enlistan a unas 600 víctimas.
Después de hacer un recorrido por su vida en la milicia y su desmovilización, alias ‘El Samario’ confirmó ante el abogado demandante Terrence Collings Wolth; el bufete de abogados de la Drummond; medios de comunicación y asistentes a la diligencia, que sostuvo una reunión en el mes de noviembre de 2000 en la Loma de Potrerillo, Cesar, con el entonces contratista de la empresa minera Jaime Blanco Maya, Jairo de Jesús Charris Castro y el jefe de seguridad de alias ‘Tolemaida’ para hablar sobre las operaciones que se realizarían en contra de sindicalistas que estaban ideando un paro en protesta por la mala calidad de la alimentación y que éste paro generarían pérdidas para la empresa.
La reunión se realizó debido a las buenas relaciones que sostuvo Drummond con el que era el comandante de las AUC, Jhon Jairo Esquivel Cuadrado, alias ‘El Tigre’.
También dijo que hubo una segunda reunión en frente de la sede de la multinacional para ultimar detalles de los homicidios donde estuvieron presentes el funcionario de la Drummond, Alfredo Araujo y alias ‘Tolemaida’.
Según ‘El Samario’, el grupo ilegal sabía cuáles eran los movimientos dentro de la empresa minera gracias a las informaciones suministradas por Arístides Peinado, un empleado de Drummond que también hacia parte de las AUC.
Tres meses después de dicha reunión sucedió el asesinato de del presidente y vicepresidente de Sintramiernegética Valmore Locarno Rodríguez y Víctor Hugo Orcasita Amaya. Exactamente el 12 de marzo de 2001 cuando se desplazaban en un bus de la Drummond de la mina La Loma a Valledupar, donde residían.
Alcides Manuel Mattos también habló de una tercera reunión sostenida en una finca cerca al municipio de Bosconia. La catalogó de importante porque contó con la presencia de un ciudadano norteamericano encargado de la seguridad de la mina Pribbenow de apellido Jakim; según él, también asistieron Rodrigo Tovar Pupo, alias ‘Jorge 40’; alias ‘Mocho’; alias ‘Niki’; alias ‘Macho Man’; alias ‘05’, alias ‘Kenner’, Alfredo Araujo y alias ‘Tolemaida’.
Alias ‘El Samario’ afirmó además que el frente comandado por Oscar José Ospino Pacheco, alias ‘Tolemaida’, tenía convenios con la multinacional Drummond para reforzar la seguridad de la vía férrea y asesinar a quienes fueran en contra de sus intereses.
“Su grupo obtuvo pagos de mano de la empresa minera por el orden de los 1.5 millones de dólares por la muerte de los sindicalistas y que además recibirían mensualmente 150 mil dólares por ayudar en la seguridad de la empresa”, dijo el exparamilitar.
RPT Noticias intentó contactar a Alfredo Araujo, representante de la Drummond en Valledupar pero en su oficina aseguraron que se encontraba fuera de la ciudad por lo que no fue posible conocer su posición frente a estas acusaciones del exparamilitar.
Por la muerte de los sindicalistas Valmore Locarno Rodríguez y Víctor Hugo Orcasita Amaya ya había sido condenado Jairo de Jesús Charris Castro conocido con el alias de 'El Viejo Miguel' o 'Miguel'.

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